A veces me desoriento. Llevo mucho tiempo, en mis conferencias, hablando del cambio, de la necesidad del cambio y la humanidad intrinseca del mismo, y sin embargo, a veces, me doy cuenta que hay cosas que apenas cambian.
Si en siglo I los ciudadanos romanos se olvidaban de los asuntos políticos acudiendo a los juegos de circo y recibiendo el trigo que le regalaban los emperadores, hoy los ciudadanos españoles (y de medio mundo) nos olvidamos de todo con tal de ver un partido de fútbol. La historia se repite, el mundial de hoy es el pan y circo de ayer.
Hoy se ha acabado la crisis, hoy a nadie le importa que se haya abaratado el despido, que los sindicatos hayan convocado una huelga general, que se rumoree que en Europa van a tener que rescatarnos, ..., hoy España ha jugado su primer partido y eso es lo único que, de verdad, importa. Hoy no vale la pena preocuparse de otras tonterías. En días como hoy pienso que tenemos lo que nos merecemos. Pan y circo.
Hoy he estado en Expomanagement (nivel bajito el del primer día), donde se supone que acuden los gurús del liderazgo del panorama nacional (y algún internacional) a compartir lo último en gestión con los directivos y líderes del momento, y cuál ha sido mi asombro al ver que en uno de los salones, la conferencia de las cuatro de la tarde era “retransmisión del partido España – Suiza”. Éxito de público y lleno total. Pan y circo.
En otro salón, el ponente, un conocido formador, muy unido al mundo del fútbol, se ha sentido indispuesto y ha cancelado su conferencia. ¿Casualidad? En todo caso no ha importado mucho, siempre quedaba el partido. Pan y circo.
Al llegar a casa me encuentro con un mail del decano de mi facultad convocando a todo el personal universitario a ver el partido (en horario laboral) en el aula magna. ¡Toma Bolonia! Universidad, cuna de la ciencia, templo de la sabiduría, vivero y refugio de grandes investigadores, ¿qué ha sido de ti…? Pan y circo.
El otro día me contaba un amigo como, en su empresa, habían decidido adelantar la jornada intensiva para que los empleados pudiesen ver el mundial. Como me decía mi hermana, "es lógico, si total lo van a ver de todas maneras…" ¡Toma crisis! ¡Toma índices de productividad! ¡Toma pan y circo!
A los políticos les ha venido Dios a ver con el mundial, qué más da la reforma laboral, la huelga general, o la crisis mundial, a la gente lo que le importa es el fútbol. Démosles fútbol, démosles pan y circo, que es lo que se merecen, lo que nos merecemos.
miércoles, 16 de junio de 2010
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3 comentarios:
Será por el 'pan y circo' por lo que el Consejo de Ministros se ha adelantado al miércoles en vez de hacerlo los viernes como de costumbre? No es por pensar mal...
Bueno, si el pan y el circo permiten que nos sentamos mas unidos, menos enfrentados queria yo decir, si por una vez conseguimos tener un objetivo comun, y empujar todos en la misma direccion, yo digo que invirtamos hora y media en comernos el pan y ver el circo, que a lo mejor sale algo positivo de ahi, como por ejemplo el buen humor las ganas de mejorar, de ser los numero uno en algo, la alegria de vivir. Y si como dicen por ahí algunos, estoloarreglamsoentretodos, comiendo pan y viendo el circo..., pues vivan el pan y el circo.. Y si resultaquesverdad?
Totalmente de acuerdo con Jose Pividal.
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