miércoles, 3 de diciembre de 2008

Día 3: Respeto

Si abrí los ojos para ver el rostro
puro y terrible de mi patria,
si abrí los labios hasta desgarrármelos,
me queda la palabra.

(Blas de Otero)


A veces, desde estos foros, nos llenamos la boca de palabras como diversidad, liderazgo, igualdad de oportunidades, proyectos, valentía.... Y muchas veces, demasiadas, nos olvidamos que estamos en un país, donde por pensar distinto, por tener proyectos, por ser valiente y tener un sueño empresarial, puede llegar un troglodita y meterte un tiro en la nuca.

A veces, muchas veces, demasiadas, nos olvidamos que hay profesionales que no tienen las cosas tan fáciles. Que en este país, en pleno 2008, por ser empresario, político, profesor de universidad, militar, periodista,... aún te pueden matar. Que en este país, mientras algunos debatimos sobre Bolonia y el futuro del modelo educativo, hay personas (o animales) que siguen educando a sus hijos en el odio a lo diverso, en el odio, hasta la muerte, a los que piensan de forma distinta.

Hoy, para Ignacio y para los que, como él, se juegan la vida día a día echándole un par de cojones y haciendo bien su trabajo, mi respeto, mi cariño y mi admiración.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué triste que en pleno adviento tengas que escribir sobre este tema, pero es que estos malnacidos siempre están ahí, acechando, y en cualquier momento PUM!

Ojalá la próxima víctima sea uno de ellos, a quien se le estalle una bomba entre las manos o una pistola dispare a su dueño mientras la limpia.

Ojalá nunca lamentásemos más víctimas.

la elfa dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
la elfa dijo...

Se que la Navidad es el momento del anio para el perdon, pero a estos cobardes yo solo les deseo el ojo por ojo. Que cojan a esos dos cobardes que le han pegado dos tiros a un senior de 70 anios, y que les peguen un par de tiros a ellos. Y si sobreviven, que les encierren en una pocilga y se pudran poco a poco hasta que se mueran.

Te admiro por haber escrito un post tan bueno, tan claro, tan humano. Yo estoy llena de odio, de amargura, de preguntas, y solo me apetece vengarme y decir tacos. Pero por ti me controlo.

Un beso, y buen viaje!