miércoles, 15 de diciembre de 2010

Día 15: Belleza interior

El otro día hacía referencia en el blog un estudio realizado en Israel, en el que se afirmaba que los guapos tienen (perdón, tenemos) más posibilidades de encontrar un empleo, y que además parece ser que en general tienen (perdón, tenemos) más éxito profesional. Todo parece indicar, que la imagen sigue, siendo un factor determinante de las relaciones sociales en el siglo XXI, y que es una primera puerta de acceso a infinidad de posibilidades, por injusto que a veces, nos parezca.

Todos sabemos que en la mayoría de las empresas hay códigos de vestimenta explícitos o implícitos que actúan como una norma más del día a día laboral. Es cierto también, que la vestimenta formal es cada vez menos usual en las grandes compañía, mis últimos cursos y conferencias han sido en grande multinacionales en la que, por ejemplo, los hombre no llevaban chaqueta y corbata, yo mismo cada vez me pongo menos la corbata a no ser que lo exija el guión (es decir, la empresa en donde “actúo”).

Pero hoy me he encontrado con el extremo opuesto, hoy he leído en prensa que un importante banco suizo (con presencia multinacional) ha editado un código de vestimenta (44 páginas) para sus empleados, con todo lujo de detalles, sugiriéndole una vestimenta seria y formal muy parecida a la de cualquier conductor de coche fúnebre. Algunas de la premisa son, traje negro, camisa blanca, falda por debajo de la rodilla, poco o nada maquillaje….y lo mejor de todo, ropa interior ¡¡¡ color carne!!! Lo del negro, lo puedo entender como forma de dar imagen de discreción y seguridad, pero lo de la ropa interior….(A ver si va a ser eso lo que llaman belleza interior…) Por un lado, no sé si alguien de RRHH se va a encargar de supervisar la ropa interior del personal, (si es así igual mando el CV), para ver si se aplica el código, por otro lado, ¿color carne? pero ¿a quién se le ha ocurrido eso? Probablemente lo que quieran es evitar los contacto sexuales entre los empleados y/o con los clientes, porque está claro, que por mucho que te guste alguien del banco con un traje de chaqueta elegante y rompedor, si llegado el momento de la verdad descubres unas bragas o unos calzoncillos color carne, se te baja la libido hasta los tobillos.

Últimamente comentaba en un curso de creatividad que uno de los indicadores que señalan si una empresa favorecía, o no, el pensamiento creativo entre sus empleados, es la libertad que otorga a la hora de permitir que cada uno vista como quiere. Está claro que en determinados sectores, la creatividad no es un valor a considerar, sino más bien una especie a exterminar. Para eso, como me dice Sancho, que les den uniforme, como en Carrefour, así se aseguran de que nadie se equivoca y además ahorran a los empleados una pasta en ropa. (De hecho en muchas empresas, en Latinoamérica, los empleados de oficinas llevan uniforme)

Pero la noticia que he leído hoy que más me ha gustado es una cuyo titular afirma que dormir poco nos hace más feos, y comenta los resultados obtenido de un estudio sobre el sueño y la belleza.

Llegado este momento, no me resisto a aplicar mis conocimientos de lógica aprendidos en tercero de BUP, y formular un silogismo de pura lógica Aristotélica:

- Los guapos tienen más éxito en su vida profesional

- Lo que duermen más se vuelven más guapos

- Ergo: Me voy a echar a dormir, a ver si supero de una vez la crisis

1 comentario:

la elfa dijo...

Jajaja Asi que la ropa interior color carne no te pone eh? y yo que pensaba regalarte un slip de ese color! ;)